Lisinopril

Usos de Lisinopril

El lisinopril ayuda a controlar la hipertensión arterial en adultos y niños a partir de seis años, solo o en combinación con otros medicamentos. Además, en adultos, trata la insuficiencia cardíaca congestiva y mejora la supervivencia tras un infarto de miocardio.

Perteneciente a la clase de medicamentos denominados inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (IECA), el lisinopril actúa reduciendo las sustancias químicas específicas que constriñen los vasos sanguíneos. Esta acción favorece un flujo sanguíneo más fluido y permite al corazón bombear la sangre con mayor eficacia.

Precauciones y advertencias

Evite Lisinopril si tiene antecedentes de reacciones alérgicas a éste o a otros inhibidores de la ECA como captopril, fosinopril, enalapril, benazepril, moexipril, perindopril, quinapril, ramipril o trandolapril.

Para asegurarse de que el uso de Lisinopril es seguro, informe a su médico si tiene antecedentes de lo siguiente:

• Cardiopatías
• Tensión arterial baja
• Recuento bajo de glóbulos blancos
• Diabetes
• Enfermedad hepática o renal

No utilice Lisinopril durante el embarazo, ya que puede dañar al feto.

Dosificación

Para la hipertensión:

• Tomar 10 mg por vía oral una vez al día. La dosis máxima diaria es de 80 mg.

Para la insuficiencia cardíaca congestiva:

• Tome de 2,5 a 5 mg de lisinopril una vez al día. La dosis máxima es de 40 mg.

Para el infarto de miocardio (ataque al corazón):

• Tomar 5 mg por vía oral en las 24 horas siguientes al inicio del infarto agudo de miocardio.

Efectos secundarios

Efectos secundarios frecuentes:

• Dolor de cabeza
• Tensión arterial baja
• Mareos
• Dolor torácico
• Debilidad
• Falta de aliento
• Hinchazón
• Pérdida de apetito