A Mary, una mujer vibrante de unos 40 años, le diagnosticaron recientemente una enfermedad crónica. enfermedad renal. Mientras se enfrentaba a la noticia, se sintió abrumada por una mezcla de emociones: miedo, incertidumbre y temor a navegar por aguas desconocidas. La historia de Mary refleja las experiencias de millones de personas que se enfrentan a los retos de la ERC. La mayoría de ellos tienen millones de preguntas en la cabeza relacionadas con la enfermedad y con lo que pueden hacer para superar la situación sin estresarse.
Enfermedad renal crónica (ERC) es una enfermedad que altera la vida de millones de personas en todo el mundo. Aunque es crucial tratar los aspectos físicos de la ERC, es igualmente importante abordar el bienestar emocional y mental de las personas que viven con esta enfermedad. Esto se debe a que la adaptación a una enfermedad crónica como la ERC puede suponer un reto emocional. La enfermedad puede ser angustiosa, ya que las personas que la padecen a menudo experimentan cambios importantes en su vida. En consecuencia, tanto los pacientes como los cuidadores pueden experimentar tristeza, miedo, ansiedad, frustración e ira. En algunos casos, las personas con ERC pueden necesitar diálisis o un trasplante de riñón, lo que puede aumentar aún más la ansiedad y la angustia emocional de los pacientes y sus cuidadores.
Por todas estas razones, el apoyo emocional es tan importante como el apoyo médico para las personas con ERC y sus cuidadores. Les ayuda a gestionar sus emociones, aliviar el estrés y mejorar su calidad de vida. Los pacientes y cuidadores pueden beneficiarse de hablar con familiares y amigos, unirse a grupos de apoyo, obtener asesoramiento en salud mentalo participando en actividades que les hacen felices. He aquí algunas formas de mostrar apoyo a alguien que te importa.
Hablar con amigos, consejeros y padres: Una estrategia vital para hacer frente a la ERC
Hablar con amigos, consejeros y padres es una forma de sobrellevar el estrés y los cambios que conlleva la ERC es a través de la apertura. Los estudios demuestran que compartir los sentimientos y preocupaciones puede aliviar la carga emocional. Entablar conversaciones no sólo proporciona una salida para expresar las emociones, sino que también ayuda a crear una red de apoyo.
¿Vive con alguien en diálisis? Así se les reduce el estrés
El viaje puede ser todo un reto para las familias y los cuidadores de alguien que vive en diálisis. Tienen que cuidar de la salud física y mental de los pacientes, así como de sí mismos, ya que el proceso de diálisis puede ser emocionalmente agotador para ambos. Los estudios publicados en el Journal of Renal Care sugieren que los familiares que participan activamente en el cuidado de un paciente en diálisis necesitan mucha ayuda para controlar el estrés. He aquí algunas estrategias de afrontamiento que pueden beneficiar tanto a los cuidadores como a los pacientes en diálisis.
Terapias basadas en la atención plena: Se ha demostrado que las actividades basadas en la atención plena, como la meditación, los ejercicios de respiración profunda o el yoga, ayudan a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión en personas con enfermedad renalasí como a sus cuidadores. Estas prácticas se centran en anclarse en el momento presente y aceptar los pensamientos y las sensaciones.
Técnicas de gestión del estrés: Tanto los cuidadores como los pacientes pueden colaborar en técnicas de gestión del estrés como la relajación muscular progresiva, la imaginación guiada o la escritura de un diario para hacer frente al estrés. Estas actividades permiten liberar tensiones, controlar los pensamientos negativos y fomentar la sensación de bienestar.
Red de apoyo: Los amigos, la familia o los grupos de apoyo desempeñan un papel importante a la hora de ofrecer apoyo emocional y ánimo. Compartir experiencias y preocupaciones con otras personas que entienden por lo que estás pasando puede ser increíblemente útil.
Terapia o asesoramiento: Buscar ayuda profesional de un terapeuta o consejero puede proporcionar un valioso apoyo a los pacientes y a la persona que vive con ellos. Los asesores desarrollan estrategias de afrontamiento, ayudan a superar los retos emocionales y abordan cualquier problema de salud mental que pueda surgir como consecuencia de la diálisis.
Técnicas de relajación: Realizar actividades que favorezcan la relajación, como escuchar música relajante, tomar baños calientes o practicar la aromaterapia, puede ayudar a aliviar el estrés y fomentar la sensación de bienestar.
Cuidar a una persona con insuficiencia renal
El cuidado de una persona con insuficiencia renal va más allá del apoyo físico. La atención emocional desempeña un papel crucial en su bienestar general. He aquí algunas formas de proporcionar cuidados emocionales a una persona con insuficiencia renal:
Empatía y escucha activa: Practica la escucha activa e intenta comprender sus emociones y preocupaciones sin juzgarles. Permíteles expresar libremente sus sentimientos y valida sus experiencias. Muestra empatía y hazles saber que sus emociones son válidas y comprendidas.
Comunicación abierta: Fomentar una comunicación abierta y sincera. Cree un espacio seguro para que los pacientes compartan sus miedos, frustraciones y preocupaciones sobre su insuficiencia renal. Hágales saber que usted está ahí para escucharles y apoyarles a lo largo de su viaje.
Edúcate: Infórmese sobre la insuficiencia renal, sus opciones de tratamiento y los posibles retos. Comprender su enfermedad le permitirá ofrecerles un mejor apoyo y le ayudará a empatizar con sus experiencias. También te permite responder a sus preguntas y resolver las dudas que puedan tener.
Sea un defensor del paciente: Ayude al paciente a recopilar información sobre sus opciones de tratamiento, acompáñele a las citas con el médico y tome notas durante las consultas médicas. Actuar como su defensor les empodera y les asegura que no están solos en su viaje.
Ofrezca ayuda práctica: Ayúdeles con las tareas prácticas que pueden suponer un reto debido a la insuficiencia renal. Por ejemplo, llévelo en coche, hágale la compra o adminístrele la medicación. Al proporcionarles ayuda práctica, reduces su estrés y demuestras que participas activamente en su cuidado.
Fomentar el autocuidado: Recuérdeles la importancia del autocuidado. Fomente actividades que promuevan la relajación, como dedicarse a aficiones, practicar técnicas de atención plena o tomarse descansos cuando sea necesario. Ayúdales a encontrar formas de reducir el estrés y mejorar su bienestar emocional.
Póngalos en contacto con grupos de apoyo: Anímeles a unirse a grupos de apoyo o comunidades en línea donde puedan conectar con otras personas que estén pasando por experiencias similares. Estos grupos ofrecen la oportunidad de compartir historias personales, intercambiar consejos y encontrar apoyo emocional de personas que realmente entienden por lo que están pasando.