Eleanor siempre había sido una mujer activa. Pero ahora, a los 65 años, sentía que el peso de la edad se le echaba encima. Había notado que los kilos iban aumentando poco a poco con los años, y eso empezaba a afectar a su movilidad y a su bienestar general.
Eleanor decidió que había llegado el momento de tomar las riendas de su salud y empezar a perder peso. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que perder peso después de los 60 conllevaba retos únicos. Tuvo que luchar contra la rigidez muscular y el dolor articular, lo que le dificultó mucho el proceso. Eleanor luchaba por encontrar un equilibrio entre perder peso y forzar demasiado su cuerpo, lo que le hacía temer lesiones o contratiempos.
Por desgracia, este tipo de situaciones son habituales a medida que envejecemos. Nuestros cuerpos pierden capacidad de reacción, lo que dificulta la consecución de objetivos de pérdida de peso aunque queramos mantenernos en forma. Por eso es importante fijarse objetivos realistas y pérdida de peso alcanzable objetivos después de los 60 para garantizar el éxito a largo plazo.
La importancia de los objetivos realistas
Tanto Eleanor como Sandra habían cometido algunos errores en los días iniciales de su viaje de reducción de masa corporal. "Me había fijado expectativas poco realistas y era demasiado dura conmigo misma. Cuando 30 minutos de caminata a paso ligero no sirvieron de nada, me apunté a un gimnasio local y fresé durante una hora cada dos días. Me sentí agotada y desmotivada cuando el segundo plan tampoco funcionó", confiesa Eleanor.
Las personas mayores pueden tener distintos motivos para perder peso. Algunos quieren mejorar su salud general, mientras que otros quieren controlar enfermedades crónicas como la diabetes o la hipertensión. El entrenador personal para mayores Igor se centra en fijar objetivos realistas, independientemente de la motivación, por dos razones. "Fijarse objetivos realistas de pérdida de peso al mes es esencial para protegerse de lesiones físicas y decepciones. A veces se me acercan clientes con expectativas poco realistas de perder 5 kilos en 1 semana. Eso es imposible, estresante y físicamente agotador para las personas mayores", dice Igor.
Salud y seguridad
La salud y la seguridad de las personas mayores deben ser siempre la máxima prioridad. Una disminución rápida o extrema de la masa corporal puede provocar pérdida muscular, deficiencias nutricionales y otras complicaciones de salud. Unos objetivos realistas garantizan que la pérdida de peso se produzca a un ritmo seguro y sostenible.
Reducción del estrés
Unas expectativas de adelgazamiento poco realistas pueden provocar estrés y ansiedad. Establecer objetivos alcanzables reduce estas emociones negativas y contribuye a una experiencia global positiva.
Esto nos lleva a la cuestión de cómo fijar objetivos realistas.
Fijar objetivos realistas
Tras dos intentos fallidos, Eleanor contrató a un entrenador para elaborar un plan realista. "Lo primero que me preguntó mi entrenador fue: '¿Cuál es tu objetivo? Mi respuesta instantánea fue '9 kilos menos'. Tras una introspección, nos dimos cuenta de que mi principal objetivo era mejorar mi metabolismo, que era la causa principal de mi aumento de peso. Su segunda pregunta fue: "¿Qué es lo que más le gusta hacer? Siempre me ha gustado bailar. Unas cuantas preguntas más tarde, mi entrenador y yo elaboramos un plan que se ajustaba a mis intereses y necesidades, y al mismo tiempo cumplía el objetivo de mejorar mi metabolismo." Hoy, Eleanor pesa 2,5 kilos menos con una rutina de ejercicios sencilla y sin estrés que combina yoga y Zumba. "Después de cada sesión de Zumba, recupero la energía. Para obtener los mejores resultados, es igualmente importante disfrutar del camino", afirma Eleanor.
Establecer objetivos específicos, realistas y alcanzables para las personas mayores implica unos cuantos pasos clave:
Defina sus objetivos
Identifique su motivo para perder peso. ¿Quiere mejorar su salud, controlar una enfermedad o aumentar sus niveles de energía? Conocer sus motivaciones le ayudará a fijar objetivos claros.
Consulte a un profesional sanitario
Comente sus objetivos de pérdida de peso con su profesional sanitario. Puede ayudarte a fijar un objetivo seguro y realista y orientarte sobre los ajustes necesarios en la dieta o el estilo de vida.
Crear un plan
Trabaje con un dietista o nutricionista titulado para crear un plan de comidas personalizado que se ajuste a sus necesidades calóricas, requisitos nutricionales y preferencias de sabor.
Controle sus progresos
Controle su peso y mida sus progresos una vez a la semana en lugar de diariamente. Una diferencia insignificante con respecto al último día puede decepcionarte. Considere la posibilidad de utilizar un diario de alimentos para registrar sus comidas, el ejercicio especial (más de 50) y las emociones relacionadas con la alimentación.
Sea paciente y adaptable
Comprenda que la pérdida de peso puede ser más lenta en las personas mayores debido a los cambios metabólicos. Sé paciente y adaptable, ajustando tu plan según sea necesario para lograr un progreso constante.
Celebrar los hitos
Celebra tus logros a lo largo del camino. Reconozca y recompense sus esfuerzos. Haz estas pequeñas cosas para mantener la motivación.
Métodos saludables de pérdida de peso para personas mayores
Antes de fijar objetivos concretos de pérdida de peso, es esencial consultar a un médico, identificar las condiciones de salud subyacentes y crear un plan seguro. También te ayudaría tener en cuenta lo siguiente:
Seguir una dieta equilibrada
Una dieta equilibrada es la piedra angular del éxito en la pérdida de peso. Céntrese en los alimentos integrales, como frutas, verduras, proteínas magras y cereales integrales. Tenga en cuenta el tamaño de las porciones y considere la posibilidad de reducir su ingesta diaria de calorías.
Actividad física regular
No se trata de la rigurosidad del ejercicio, sino de su regularidad. 30 minutos de ejercicio regular de su elección pueden suponer una mejora lenta y constante de su peso.
Las personas mayores deben combinar ejercicios aeróbicos, de fuerza y de flexibilidad. Empiece despacio y aumente gradualmente la intensidad y duración de los ejercicios a medida que se sienta más cómodo con la rutina.
Hidratación
Mantenerse correctamente hidratado es crucial. La deshidratación puede confundirse a menudo con el hambre, lo que lleva a comer en exceso. Asegúrate de beber una cantidad adecuada de agua a lo largo del día.
Sueño adecuado
Un sueño de calidad es esencial para controlar el peso. La falta de sueño puede alterar las hormonas del hambre y llevar a comer en exceso. Intente dormir entre 7 y 9 horas por noche.
Mantener el éxito
Una vez conseguidos los objetivos de pérdida de peso, mantener un peso saludable es igual de importante. Es esencial seguir una dieta equilibrada y una rutina de ejercicio regular para evitar recuperar peso.
En conclusión, establecer objetivos realistas de pérdida de peso para las personas mayores es un paso fundamental para promover su salud y bienestar general. Con el enfoque, el apoyo y el compromiso adecuados, las personas mayores pueden alcanzar y mantener un peso saludable que mejore su calidad de vida. Recuerde siempre que la salud y la seguridad deben ser las principales prioridades a la hora de embarcarse en un viaje de reducción de peso, y consultar con profesionales sanitarios es clave para el éxito.